Atrás quedaron los duros años de la cuarentena eterna que pegó con especial rigor sobre la actividad hotelera.
El Howard Johnson de Funes no sólo resistió el embate sino que la franquicia internacional dirigida por Alejandro Piscione y su hijo Mauro, encara reformas de su “Calma Spa” de cara a la temporada estival que promete gran volumen de turistas en la ciudad.
“El hotel trabaja a pleno todo el año, gracias a su perfil variado de huéspedes”, comentó Alejandro Piscione a El Occidental mientras señalaba a un grupo de viajeros desayunando: “Esta gente es cliente corporativo, pero así como recibimos ejecutivos, también alojamos familias que se escapan incluso de Rosario para disfrutar unos días de campo”.
Continuando con el análisis de la nueva realidad que vive su empresa, Piscione indicó: “la gente que visita Rosario prefiere alojarse en Funes, para disfrutar de su entorno verde”. Este fenómeno también contagió al turismo generado por las ferias y convenciones, otro público que capta el hotel local, aunque al respecto el empresario admite: “Si bien contamos con una sala para más de 300 personas y salas menores de apoyo, si el evento es de magnitud, parte de los pasajeros debe alojarse en Rosario”. En este sentido, el titular de la cadena ve con buenos ojos la llegada de nuevos alojamientos para consolidar un “polo hotelero” que capte el millonario movimiento generado por los congresos.
Sin dudas el Howard Johnson tiene una ubicación envidiable sobre la Autopista Rosario Córdoba, a minutos del aeropuerto, que lo perfila no solo como receptor de convenciones sino que lo posiciona en el segmento corporativo estando ni más ni menos frente a Ciudad Industria, el monumental polígono que comenzará a funcionar el próximo año, donde una vez abiertas las diferentes actividades se crearán más de 10.000 puestos directos.
Mientras tanto el hotel invierte en mejoras edilicias para prestar un servicio diferencial, apuntando esta temporada a su espacio “Calma Spa”.
“Hicimos las obras necesarias para otorgar más privacidad a nuestro spa, restringiendo el ingreso a menores, sacándolo como lugar de paso para llegar a la piscina cubierta. Generamos así un ambiente íntimo para que nuestros huéspedes puedan disfrutar de una sala de relax, sauna seco, sauna húmedo, ducha escosesa, baño finlandés, así como de terapias complementarias”, explica Mauro Piscione, a cargo de supervisar las obras que quedarán inauguradas próximamente.
