En noviembre del año pasado, el gobernador Omar Perotti encabezó la apertura de sobres con las ofertas para una nueva obra de ampliación del Acueducto Gran Rosario, en sus ramales Funes e Ibarlucea. Dichos tramos contaban con una inversión, actualizada a octubre pasado, de casi 4.200 millones de pesos y un plazo de ejecución de 18 meses.
En esa oportunidad, se presentaron dos oferentes para realizar la obra: La primera oferta fue de la empresa Riva SA, que cotizó los trabajos en 5.743.801.652,89 pesos. Mientras que la segunda, fue de la UTE compuesta por Obring-Pecam-Edeca, que presentó una cotización de 5.329.988.978,76 pesos, quedando como ganadora de la licitación.
A casi nueve meses de aquella apertura de sobres, con la adjudicación a la UTE de Obring, Pecam y Edeca, el contrato aún no se firmó.
Concretamente, para la llegada del agua a través del ramal del Acueducto Gran Rosario, se necesita la terminación de las etapas I y II. La primera, que implica una obra de ampliación de la planta potabilizadora, se encuentra en plena ejecución. La segunda, que consiste en el tendido de un acueducto de 10 km que llega hasta una estación de bombeo a construirse en Av Uriburu y Av Circunvalación, está pendiente de adjudicación por parte de ENOSA -Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento-.
Por último, el ramal hacia Funes, tan utilizado políticamente en un resonante acto encabezado por el Gobernador Omar Perotti en un club de la ciudad, lleva una espera de 9 meses para la firma del contrato, que como sucede con toda obra licitada, debe sufrir una “redeterminación”, al quedar descalzado su precio inicial con el implacable impacto inflacionario.
La noticia impacta negativamente en la ciudad, con especial fuerza en el casco céntrico y vastos sectores que no pertenecen a los nuevos desarrollos que construyen su propia planta de ósmosis inversa para la potabilización del agua.
Desde el Concejo, su presidente, Carlos Olmedo, explicó a El Occidental, que para paliar la falta de agua, luego de haber presentado un reclamo ante el titular de Aguas Santafesinas por la obra del acueducto Gran Rosario, presentó un proyecto que aporta una alternativa para llevar agua potable de forma inmediata a dos de los barrios funenses que hoy no cuentan con ese servicio, instalando una planta modular de osmosis inversa. “Si bien en Funes Norte y Cantegrill es más sencillo porque ya están hechas las conexiones domiciliarias, la idea es llevar este tipo de plantas modulares a otros barrios como Villa San Juan, Funes City, entre otros”, destacó el edil del PRO.
La propuesta prevé el financiamiento a través de los fondos que obtiene la municipalidad por la Ordenanza de Plusvalía y propone que sea una cooperativa de la ciudad la que lleve adelante su funcionamiento y mantenimiento.
