Ciudad Futura pone palos en la rueda a nuevo proyecto de condominios en Rosario

En el Concejo Municipal circula un permiso especial para un desarrollo inmobiliario, pero algunos grupos se resisten

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Sigue el debate en el Concejo Municipal de Rosario por el proyecto de condominios en la cotizada esquina de Brassey y Tarragona, frente al complejo residencial Fisherton Park. Por estos días el debate continuó en la Comisión de Planeamiento y los concejales justicialistas y de Ciudad Futura no ceden en sus cuestionamientos y ahora pusieron el foco en la compensación que deberá abonar el privado dueño del predio.  

Juan Monteverde, por Ciudad Futura, sostuvo que este proyecto “para la compensación es de rango 4 cuando debería pagarse por rango 9”. Fabrizio Fiatti, edil de CREO Rosario y presidente de la comisión de Planeamiento, aseguró que “es un punto por mirar”. Así, el proyecto seguirá en estudio. 

El mayor punto de confrontación entre los ediles es por el valor patrimonial (B2) de la vivienda emplazada en el terreno. La categoría B2 implicaría la preservación de la mayor parte de la estructura y una serie de tareas de cuidado y puesta en valor. En este sentido, los dueños propusieron utilizarla como Club House, sumándole un total de entre 45 y 50 unidades de vivienda con tipologías de uno, dos y tres dormitorios, con superficies promedio de 130 m2 de uso exclusivo.   

Por otro lado, el estacamiento del proyecto se debe a que está ubicado en el Área de Protección Histórica – “Eje Fundacional Fisherton”. Con lo cual, desde la Secretaría de Planeamiento aclararon que el proyecto a desarrollar debería ajustarse a las “Condiciones Edilicias, Retiros y Usos de las Áreas de Protección Histórica”, contenidas en el Capítulo “Indicadores Urbanísticos para las Áreas Particulares” de la ordenanza “Reordenamiento Urbanístico del Cordón Perimetral de la ciudad de Rosario: Altura máxima de 10 metros, Factor de Ocupación del Suelo 0,33 y deslindes y retiro de fondo de 3 metros en cada deslinde medianero, entre otras.     

Monteverde volvió a arremeter contra esta situación y afirmó: “Estuvimos discutiendo para evitar que en el área de tejido se den estas cosas. Se supone que para esto hicimos la ordenanza de Fisherton para que este tipo de conjuntos llevarlo a los corredores”. 

En otro orden, pero bajo los mismos requerimientos para la zona, se desprende un tratamiento especial para ciertas especies arbóreas allí presentes. Entre aquellas a conservar se encuentran dos ejemplares de ciprés azul, dos ceibos y un liquidámbar gigante.   

 

EL PROYECTO 

La propiedad ubicada en Brassey 8002 está emplazada en un terreno rectangular con 75 metros de frente por calle Brassey, 75 metros por calle French y 100 metros por calle Tarragona, encerrando una superficie total de 7.500 metros cuadrados. La casa allí ubicada se encuentra a la venta desde hace una década, aunque, según sus propietarios, con una cantidad de consultas demasiado escueta. 

Debido a la baja demanda que genera el inmueble, sus propietarios solicitan una modificación de indicadores urbanísticos que permitan levantar “un complejo de viviendas en altura”, con una superficie edificada de entre 8.000 y 10.000 metros cuadrados. El eventual desarrollo podría significar un total de entre 45 y 50 unidades de vivienda con tipologías de uno, dos y tres dormitorios, con superficies promedio de 130 m2 de uso exclusivo. 

En los últimos años el perfil constructivo de Fisherton se volvió hacia la propiedad horizontal. Fisherton Park, por caso, se encuentra justo frente al predio de calle Brassey, constituyendo un fuerte precedente de la tendencia urbanística del barrio. A tan solo 100 metros, también por Brassey pero al 7900, se encuentra un Centro Médico del Grupo Oroño.

Ubicación del inmueble

 

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