En un escenario donde la seguridad ocupa un lugar central en la vida cotidiana, las cajas de seguridad privadas se consolidan como una alternativa cada vez más valorada. No se trata únicamente de proteger dinero o joyas, sino también de conservar documentos importantes, pertenencias de valor u otros bienes en general. Que Rosario cuente con este servicio privado de cajas de seguridad no es un detalle menor: lo posiciona como un punto de referencia en la región, ya que no todas las ciudades del interior disponen de una alternativa con estas características. Esa presencia local permitió que el servicio creciera y se consolidara entre los usuarios.
La propuesta funciona desde hace algunos años y, con el paso del tiempo, fue ganando usuarios y confianza. Su fortaleza radica en la combinación de innovación tecnológica y un crecimiento sostenido que lo fue consolidando en el mercado.
Está emplazado en el subsuelo del Shopping del Siglo, un lugar que aporta ventajas adicionales por no contar con edificios linderos y por su estructura especialmente acondicionada para reforzar la seguridad. A esto se suma un esquema de alarmas activas durante las 24 horas.
Nos explicaban desde la empresa que la bóveda, totalmente automatizada, permanece cerrada en todo momento y que el acceso de los clientes se realiza a través de un mecanismo robotizado que entrega la caja en pocos minutos, mediante la combinación de clave y llave personal, sin necesidad de que nadie ingrese físicamente al interior.
La confidencialidad también es un aspecto central: cada cliente decide qué guardar, sin obligación de informar su contenido. Las cajas están disponibles en dos tamaños —pensadas tanto para documentos como para pertenencias de valor— y se adaptan a distintas necesidades.
Otro punto que suele remarcarse es el horario. A diferencia de los bancos, que restringen el acceso a la caja al horario de atención tradicional, aquí la atención se extiende de lunes a viernes de 9 a 17, lo que representa una de sus principales bondades.
El servicio contempla además salas de uso para trámites, espacios de espera y herramientas de verificación de billetes. Está respaldado por un esquema de seguridad que involucra a compañías de seguros y de vigilancia privada.
La presencia de este servicio en Rosario marca un diferencial en la región. En un mercado donde las opciones suelen estar concentradas en los bancos, la posibilidad de acceder a cajas privadas abre un panorama distinto para quienes buscan proteger documentos y pertenencias con mayor autonomía.