“Tras la pandemia, se hizo evidente la necesidad de reinventar las ciudades y descentralizar también la oferta cultural”, señala el empresario Eduardo Costantini, poseedor de una de las colecciones de arte más valiosas de América Latina.
Una sucesión de salas con mucha transparencia se despliegan entre jardines con 24 esculturas frente al río Luján, en una superficie de 5.500 m2.
Con ingreso libre y gratuito, aloja las cinco piezas de Gabriel Chaile compradas en la Bienal de Venecia en 2022.
A 21 años de la fundación del Museo, este nuevo espacio se propone crear un centro de gravedad en la vida artística y cultural de Zona Norte, provincia de Buenos Aires, en contacto con la naturaleza y con el expertise del Malba. Despliega su acción en un paisaje que integra arquitectura de calidad, un cuidado trabajo de paisajismo y un circuito de arte público en toda la ciudad.
En palabras de Eduardo F. Costantini: “Malba Puertos nace del deseo de ampliar el impacto cultural y social del Museo en nuevas audiencias. También de la necesidad de albergar nuevas formas de expresión y exhibición, acordes al museo del Siglo XXI en el que las disciplinas y formatos son cada vez más híbridos e interdisciplinarios y el visitante, un participante activo de la obra de arte.
El proyecto surge gracias a un acuerdo institucional con Consultatio, empresa desarrolladora de Puertos y socio corporativo del Malba, que estará a cargo del financiamiento de la obra y su gestión.
En relación con la propuesta artística, Malba Puertos contempla un programa multidisciplinario que estará al cuidado del comité curatorial del Museo. Prevé desarrollar diferentes exposiciones temporarias –con foco en arte contemporáneo argentino-, además de actividades educativas y culturales al aire libre: música, cine, literatura, danza, teatro y performances, para todas las edades.
El proyecto
Malba Puertos se erige a partir de un gran techo transparente de 2.000 m2, apoyado sobre tres pabellones que contienen: una sala de exposiciones con recepción, aula infantil y servicios (500 m2), una reserva técnica de obras de arte con administración, tienda y café (470 m2) y un pabellón totalmente acristalado de 200 m2 que exhibirá en forma permanente las cinco esculturas de Gabriel Chaile
En su distribución, los pabellones generan una gran plaza abierta y techada que tiene la vocación de ser lugar expositivo, estancial y programable en el corazón de la ciudad. Este conjunto se integra a un corredor natural “Salas del bosque” (2.500 m2), primer bosque de alisos del país que contiene tres salas de exhibición al aire libre.
Los pabellones se construirán en acero, vidrio y paneles de hormigón buscando la máxima ligereza compatible con la protección de las obras. Su imagen, escueta y repetitiva, huye de alardes formales o gestos grandilocuentes para ofrecer una simplicidad que invite a su uso.
En palabras de Juan Herreros: “El gran techo transparente expresa el deseo de Malba puertos de constituirse en un lugar de encuentro alejado de la exclusividad de los museos tradicionales. El espacio público generado es también un lugar de arte, un regalo del Malba
a la ciudadanía”, comenta.
El nuevo espacio también define su escala en diálogo con las obras que ya conforman el Circuito de Arte de Puertos y una implantación que se adapta en continuidad natural al suelo diseñado por el artista Fabián Burgos. “Este afán de integración se manifiesta en el difuminado de sus bordes y en la porosidad de su constitución arquitectónica. Merece la pena resaltar este acto fundacional de pavimentar y el empeño del equipo de Puertos de tener un suelo propio y característico que sea una obra de arte con la que cualificar el soporte de las actividades de las personas”, destaca Herreros.
Estudio y colaboradores
El proyecto es autoría del despacho de arquitectura español estudio Herreros que han trabajado en el diseño del recientemente inaugurado Museo Munch de Oslo, el Espacio SOLO de arte contemporáneo de Madrid y galerías de arte como la Carreras Múgica en Bilbao.
También han intervenido en la actualización de importantes museos como el Reina Sofía de Madrid y Malba de Buenos Aires donde firmaron la transformación de sus espacios públicos en 2017 con el apoyo de Torrado Arquitectos como estudio local que repite tándem con Herreros en esta ocasión.
El paisajismo del entorno inmediato y de las grandes unidades naturalizadas del barrio-bosque, paseo litoral y plazas fue concebido por el estudio Bulla. Todo ello se inscribe en el masterplan de uno de los sectores de media densidad de Puertos, diseñado por el estudio Clusellas-Ades.