El Poder Ejecutivo ha presentado al Congreso un proyecto de ley que propone la disolución del vínculo matrimonial de manera administrativa. Esta iniciativa se suma a las causas de divorcio ya contempladas en el artículo 435 del Código Civil y Comercial de la Nación.
Así lo adelantó en su red de X el ministro de Desregulación de la Nación, Federico Sturzenegger: “¿Por qué si para casarse se puede ir a un registro, para divorciarse hay que hacer un juicio? Para los divorcios no contenciosos el proyecto busca habilitar una solución barata y eficiente con un procedimiento tan sencillo como el del casamiento. Este tipo de iniciativas forman parte de la filosofía de respeto de la voluntad individual que propugna este gobierno”.
El objetivo es ofrecer un divorcio simplificado que sea más accesible y menos costoso, permitiendo a los cónyuges disolver su matrimonio de mutuo acuerdo a través de un proceso más ágil y económico.
El texto destaca que los divorcios judiciales requieren tiempo y dinero, lo que puede limitar la disponibilidad de los bienes de las partes durante el proceso. Además, la sobrecarga de casos en los tribunales genera demoras y costos adicionales que afectan a los contribuyentes.
El proyecto también enfatiza la necesidad de dar mayor libertad a las personas para tomar decisiones sobre su vida. Se señala que el matrimonio es un “acuerdo voluntario” y, de la misma forma, su finalización puede llevarse a cabo de manera consensuada en busca de nuevos horizontes.
En resumen, esta propuesta busca mejorar la eficiencia de los trámites de divorcio, facilitar su realización y aliviar la carga del sistema judicial, ofreciendo así una alternativa más accesible y práctica para la disolución del vínculo conyugal, en respuesta a las demandas actuales de la sociedad.