Marca funense diseña muebles innovadores, se instaló en Buenos Aires y suma varios famosos a su clientela

Uno de sus productos estrella son las camas rebatibles, pensadas para ahorrar espacio en las habitaciones

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Mawen Design, la fábrica de muebles funcionales, comenzó su actividad en 2013 enfocada en diseños juveniles. El énfasis de la marca está puesto en el confort y en la alta calidad de las terminaciones. Con algunos productos de diseño exclusivos, como las camas rebatibles, que ofrecen altas posibilidades de personalización, lograron posicionarse en el mercado y trabajan con un local en Rosario y un representante en pleno Palermo Soho, Buenos Aires.

En este momento, Mawen diseña, fabrica y comercializa muebles para dormitorios juveniles y matrimoniales, zonas de estudio, estanterías, bibliotecas, placares, vestidores, racks y otros muebles a medida.

Para cumplir con la demanda, la marca tiene, además, un taller en esta ciudad y otro en Capital Federal, entre los cuales reparte su producción. “Hay partes que fabricamos acá y otras las traemos. Es una logística complicada para lograr el producto que queremos”, explicó Martín Garbari, responsable de diseño.

Aunque la mayoría de sus clientes se agrupan en Rosario y sus alrededores, Mawen comercializa a todo el país. Recientemente efectuó algunas instalaciones en Comodoro Rivadavia y Concordia, mientras que mantiene un buen nivel de actividad en su sede bonaerense.

En el último tiempo, sus buenos trabajos le permitieron ser elegida por famosos como Fabián Cubero y Micaela Viciconte, Matías Defederico, Luciana Rubinska y Débora Damato, quienes solicitaron camas para las habitaciones de sus hijos, aprovechando también los cinco años de garantía que ofrece la marca.

Las camas rebatibles con su herraje de diseño propio son uno de sus productos estrella. “Lo único que se consigue afuera son los resortes neumáticos que son de una firma canadiense. Esto tiene de bueno que solamente dependemos de una única pieza importada”, indicó Garbari. Llevó un año de desarrollo y se inspiró en la necesidad de una clienta que necesitaba mudarse a una casa en construcción donde solo podía habitarse el quincho.

 

Otro nuevo diseño es la Nido 3, que consiste en dos camas con escritorio integrado, pensada para habitaciones de niños. La “cama mágica” y su posibilidad de darse vuelta y revelar un escritorio también está entre las soluciones para espacios limitados.

La misma lógica de personalización puede aplicarse a otros elementos del catálogo. “Mawen Design trabaja para resolver materialmente las ideas de sus clientes y transformarlas en realidad. De acuerdo al espacio disponible, trabajar de la mejor manera para optimizar el mismo. Además, ofrece asesoramiento tanto en sus puntos de venta, como en obra. Asimismo, diseña los proyectos en 3D, para que el proyecto y sus resultados puedan analizarse correctamente y en tiempo real”, explican desde la compañía.

Además, tras el cimbronazo de la pandemia, incorporó nuevas líneas de diseño a su catálogo, como el amoblamiento para cocinas y baños. “La gente vio nuestro régimen de cumplimiento y empezó a demandarnos este tipo de productos”, comentó Garbari.

A la firma le queda por delante el período de pospandemia, con un movimiento que ya no se parece al de 2020, cuando la imposibilidad de viajar hizo que muchas personas opten por renovar sus casas. No obstante, el repunte de la construcción acompañó de buena manera sus líneas de baño y cocina, con lo cual tiene un producto competitivo y prometedor.

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