Roldán acaba de poner en venta uno de los terrenos más simbólicos de su casco urbano: el predio donde hasta hace poco se ubicaba la histórica Casa Amsler. Son casi 2.700 m² sobre Bv. San Martín, entre Urquiza y Belgrano, con 55 metros de frente sobre la avenida principal y otros 40 metros sobre San Luis, una ubicación estratégica para potenciar la actividad comercial y urbana de la ciudad.
La propuesta, impulsada por las inmobiliarias Jumito SRL y Kaial Propiedades, apunta a captar desarrolladores interesados en reconvertir el espacio en un centro comercial a cielo abierto con departamentos en altura de hasta 3 pisos, aprovechando los servicios disponibles de luz, gas natural, agua corriente y cloacas.
“Se trata de una esquina estratégica en pleno corazón de Roldán. Inversores se buscan”, aseguró Néstor del Greco, titular de Jumito, en diálogo con El Occidental.

Su hija y socia, Juliana del Greco, explicó que si bien el Código Urbano limita la altura, este terreno permite construir planta baja y hasta tres pisos, lo que abre la puerta a un proyecto mixto con locales comerciales y viviendas.
“Una especie de centro comercial a cielo abierto sería perfectamente viable, respetando los lineamientos municipales y la identidad del lugar”, agregó.
Un sitio cargado de historia
La Casa Amsler, demolida en septiembre de 2022 por peligro de derrumbe, fue durante décadas un punto de referencia para productores agrícolas y ganaderos de Roldán y la región. Funcionó como casa de ramos generales, oficinas comerciales y sede de reuniones de figuras clave del entramado social local. En sus veredas se ubicaba incluso el histórico buzón rojo del Correo Argentino, símbolo del vínculo de la ciudad con su pasado.

“Este espacio marcó un hito para la comunidad y hoy representa una gran oportunidad para pensar en el futuro”, recordó Néstor del Greco.
A la espera de un proyecto transformador
Desde Jumito destacaron que el predio acaba de salir a la venta y que ya comenzaron las gestiones para atraer a desarrolladores que conozcan el potencial de la ciudad y sepan proyectar un desarrollo que combine innovación y respeto por la historia local.
Pese a algunas restricciones técnicas como las napas altas que impiden cocheras subterráneas, el lugar ofrece amplias posibilidades constructivas y se presenta como una de las últimas grandes piezas del centro de Roldán en buscar un nuevo destino.