El gobierno santafesino apuesta fuertemente a un 2025 con obras en el Aeropuerto Internacional de Rosario. No sólo cumplimentando etapas de la nueva terminal sino también buscando cerrar el acuerdo con Nación para la reconstrucción de la pista de aterrizaje. En paralelo, controla muy de cerca las decisiones del directorio para evitar errores no forzados.
Se trata de una obra fundamental si es que la estación aérea de Fisherton quiere mantener el estatus que tiene, como pista “alternativa” de Buenos Aires y Córdoba, entre otras estaciones aéreas. Sin embargo, el estado actual del suelo no es el mejor y desde el directorio deberán enviar un informe a ANAC para determinar las circunstancias y planes a futuro.
“Nos pidieron elevar un informe técnico y jurídico, pero es lo que se hace habitualmente”, dijo la Secretaria de Transporte de Santa Fe, Renata Ghilotti, en declaraciones radiales. No obstante, se mostró esperanzada con el acuerdo al que se podría llegar con el gobierno nacional para realizar las obras necesarias sobre la pista.
En ese sentido, sostuvo: “Definimos, y también definió Nación, que la pista del Aeropuerto de Rosario es una de las obras prioritarias a realizarse el año próximo y estamos trabajando con los equipos técnicos y legales junto con los equipos técnicos legales del Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna) para realizar la pista a partir del año que viene”.
El gobierno de Maximiliano Pullaro sabe que es imperiosa esta obra para que el aeropuerto de Fisherton siga creciendo. “Es algo esencial para nosotros porque estamos dentro del circuito de aeropuertos nacionales y somos una alternativa de Ezeiza y Aeroparque”, reconoció Ghilotti.
Asimismo, sostuvo: “Si no coordinamos con los organismos nacionales, no podemos hacer la pista. Lo que venimos conversando ahora es para terminar de definir el acuerdo entre Provincia y Nación para hacer la pista nueva, el proyecto técnico ya fue aprobado por los organismos”
Incluso la funcionaria reveló que la obra “se podría haber realizado antes”, pero que por decisiones políticas la inversión terminó en otra ciudad. “Había una decisión tomada del gobierno anterior de que iban a hacer la pista en Rosario, pero terminaron llevándose el dinero del fideicomiso a la obra de otro aeropuerto”, deslizó la Secretaria de Transporte.
Ghilotti reveló detalles de lo que sería la obra. Si bien aún no está confirmada al ciento por ciento su realización, lo que el gobierno tiene en mente es reconstruir en una primera etapa los primeros mil metros de una de las cabeceras. Seguirán por la otra punta y por último los mil metros centrales. Esto permitiría mantener el mayor tiempo posible la operatividad del aeropuerto aunque por momentos deberá estar cerrado para poder avanzar con los trabajos.
MIRANDO DE CERCA AL DIRECTORIO
Mientras tanto, en medio de acusaciones e internas en el directorio y los altos mandos del Aeropuerto Internacional de Rosario, el gobierno provincial resolvió implementar un control exhaustivo sobre la operatoria y sobre todo las decisiones que se toman para evitar desmanejos y situaciones que puedan generar discordia.
“Es una metodología de trabajo, la verdad que para nosotros es nuestra hoja de ruta desde el momento que asumimos. En mi caso trabajo con los dos aeropuertos de manera coordinada (Fisherton y Sauce Viejo). Habitualmente voy a los aeropuertos, trabajo con los directorios para sumar obras y posicionarlos”, sostuvo Ghilotti bajando el tono a una situación a la que incluso se la comparó con una intervención.
Desde el Ministerio de Producción de Santa Fe se encargaron de aclarar que no se trata de eso, sino de un “método de trabajo” que también se aplica en otros organismos descentralizados y empresas del Estado como la Empresa Provincial de la Energía o Aguas Santafesinas.
Si bien desde la provincia se empeñan en aclarar la no intervención de la estación aérea rosarina, fuentes allegadas al gobernador lo ven visiblemente molesto con la performance del aeropuerto. Entre mucha información, la Casa Gris habría recibido quejas concretas de empresas prestadoras de servicios objetando desmanejos administrativos, poca transparencia y falta de profesionalismo para el desempeño en un aeropuerto internacional.
Mientras esto ocurre y se revisan contratos y personal del Aeropuerto, se avanzan con las obras de cloacas, con la posibilidad de incrementar el transporte de cargas y también con la nueva terminal que comenzó a construirse durante el gobierno anterior.