Con Arboria, “se va a formar un centro de gran potencia” sobre la autopista

Así lo consideró Ángel Seggiaro, socio director de Fundar, quien agregó que a Galinda “se lo respira con mucho éxito”.

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La empresa Fundar avanza con dos proyectos inmobiliarios en la ciudad y en la zona oeste de Rosario, a metros de Funes, que, sin duda, absorberán la fuerte demanda residencial que emigra de la vecina ciudad en busca de espacios verdes, tranquilidad y seguridad.  

Se trata de Galinda, por un lado, que se emplazará en el futuro Bulevar Galindo y Picton, con 13.500 m2 cubiertos totales sobre un terreno de 8.800 m2, y que albergará tanto unidades  habitacionales como un paseo comercial a cielo abierto de 4.400 m2 y oficinas, desplegados en 2 edificios de planta baja en doble altura, más dos niveles.

“Es un proyecto que va a gozar de la onda positiva que tiene Funes, que es inexorable. Hoy, Funes convoca, tiene un magnetismo que tal vez no tienen otras ciudades o zonas de la región”, sostuvo el socio director de Fundar, Ángel Seggiaro, en diálogo con El Occidental. “Es un proyecto al que ya se lo respira con mucho éxito”, afirmó.

Y, por otro, Arboria, que se ubicará sobre la autopista Rosario-Córdoba, a metros del Ludueña, en un terreno de más de 200.000 metros cuadrados adquirido a Los Pasos del Jockey. El empresario desarrollador recalcó que “es una obra muy ambiciosa que generará su propia impronta, porque está en un lugar todavía a colonizar”.

En ese sentido, Seggiaro subrayó que “somos varios los que estamos allí, como Bauen Pilay y Tierra Nueva” y señaló que “vamos a terminar formando un polo suburbano con abundancia de espacios verdes, servicios y actividades”. De esa manera, afirmó: “Yo creo que se va a formar un centro de gran potencia, por lo que no tengo dudas de que eso va a tomar temperatura en los próximos meses o años”.

Es que, de acuerdo con el director de Fundar, de extensa trayectoria en el mercado regional, hoy que “el público que se moviliza del microcentro de Rosario a las afueras -mayormente, familias jóvenes- no va a pagar con su tiempo para vivir allá y trabajar en el Centro, donde cada vez es más lento llegar”. Y eso -dijo- “no tiene vuelta atrás, de ninguna manera, por lo tanto, lo que queda es fortalecer cada pequeño centro de cada ciudad”.

Consultado sobre si el sector público acompaña el desarrollo privado, Seggiaro apuntó: “Yo creo que hasta hoy, el sector privado y el público se ha acompasado. Nosotros siempre estamos dispuestos a aportar nuestra visión, porque el crecimiento urbano es muy dinámico. Los constructores queremos ser escuchados”, indicó y cerró: “Estamos en un buen punto, pero tenemos que cuidarlo, cada uno a su escala”.   



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