La heladería de autor IKA, con presencia en el barrio rosarino de Pichincha, cortó cintas de un local en Aldea Fisherton, acercándose al público funense. La nueva sucursal se ubica en Schweitzer 9028, en el importante predio donde también funciona el complejo Buena Vista Black.
IKA comenzó su actividad en noviembre de 2021 con su tienda en Marull 667, Rosario. Allí, todavía se encuentra su planta productiva. Tiempo más tarde, desembarcó en Pichincha, una de las zonas más codiciadas de la ciudad de vecina por los emprendedores del rubro gastronómico.
La oferta de la marca se basa en helados artesanales sin conservantes, además de algunas propuestas fuera de los sabores tradicionales, como dulce de leche con frutilla, sorbette de sandía, yogurt griego con maracuyá, entre otros. Además, recientemente incorporó una selección de paletas.
La llegada a Fisherton tiene lugar en una ubicación estratégica, junto al complejo Buena Vista Black, integrado por oficinas premium de entre 30 y 50 metros cuadrados, y una planta baja con locales gastronómicos. Además, en la esquina de Malabia y Schwitzer se encuentra Buena Vista Work, otro edificio de oficinas de alto nivel.
A pocos metros sobre Schweitzer se ubica una sucursal del restaurante Picaña. Marca que recientemente fue noticia por su desembarco en el corredor gastronómico de calle Yrigoyen, en Funes.
La zona se encuentra en pleno auge inmobiliario, con la revalorización de la Avenida Real, a metros de Paseo Aldea, los complejos Real Office y Real Life, y el Country Golf.