Aunque el invierno suele enfriar el mercado de tierra, Fincas Ros, el desarrollo de Fantin Desarrollos ubicado sobre la Ruta 59S en Ibarlucea, tuvo en junio su mejor mes comercial desde el lanzamiento, confirmando el interés creciente por lotes cercanos a Funes con valores sustancialmente más bajos.
«Junio fue el gran mes de venta de Fincas Ros, a pesar de estar transitando una temporada baja para este tipo de productos», destacó Martín Bonis, responsable del área comercial de la firma.
Una localización que gana fuerza
Uno de los factores claves es la ruta que conecta directamente a Funes con Ibarlucea, pasando a pocos metros del desarrollo. Este corredor vial —que está próximo a ser pavimentado— ya muestra un tránsito creciente, transformándose en una vía rápida entre Funes e Ibarlucea que desemboca prácticamente en el ingreso a Fincas Ros.
«Ese camino ya se está usando mucho más y termina en nuestro proyecto, lo que es un atractivo adicional para quienes buscan estar cerca de Funes con precios mucho más competitivos», explicó Bonis.
Un masterplan con club, deportes y vida al aire libre
Fincas Ros se proyecta en cinco etapas, con distintas propuestas para atender a diversos perfiles de compradores:
- Un barrio abierto con 615 lotes, de los cuales 260 se comercializan en esta primera etapa, con superficies que van de 360 a 550 m².
- Un barrio cerrado de 155 lotes, con promedios de 400 a 450 m².
- Una zona comercial con lotes de 750 m² sobre la misma Ruta 59S.
- Y como diferencial fuerte, la nueva sede del Rowing Club, que ocupará 3,7 hectáreas dentro del predio y contará con canchas de hockey, fútbol, tenis, futsal, vóley, natación, un skate park, un muro de climbing, un anfiteatro natural y amplias áreas verdes con bicisendas y tirolesas.
Para Bonis, esto representa mucho más que un loteo tradicional:
«Nuestra ventaja principal es el abanico de productos que tenemos, que se ajusta a lo que el público prefiera: un proyecto avanzado con pronta posesión y escritura como Fincas del Rosedal, o barrios privados en pozo como Cinco Lagos.»
Obras que impulsaron la demanda
El punto de inflexión para las ventas fue el inicio de la apertura de calles, que permitió a los interesados recorrer el lugar y dimensionar el futuro barrio.
«Se aceleró la venta cuando iniciamos la apertura de calles y la gente pudo entrar a recorrer los lotes. Además, seguimos con precios de lanzamiento, lo que potenció el interés», remarcó Bonis.
Consumidores finales y pequeños inversores
Aunque la mayoría de los compradores son familias que proyectan construir su vivienda, Bonis señaló que se está sumando un perfil distinto:
«Estamos recibiendo al pequeño inversor que prefiere poner una ficha en tierra, que tiene una buena proyección de apreciación en el mediano plazo.»
Así, Fincas Ros consolida su propuesta combinando vida al aire libre, deportes, un club social dentro del barrio y una ubicación estratégica, que gracias al corredor entre Funes e Ibarlucea —cada vez más transitado y próximo a pavimentarse— se presenta como una alternativa más accesible frente a los valores ya elevados de Funes. Todo eso explica por qué, incluso en plena temporada baja, el proyecto marcó un récord de ventas.