La cadena gastronómica Pani lanzó su nueva estrategia de expansión basada en franquicias, especialmente adaptada a locales pequeños.
La firma nació de un emprendimiento individual lanzado en 2009 por Pani Trotta, actualmente titular de la compañía. La publicista devenida en empresaria gastronómica comenzó vendiendo tortas en su propia casa, para luego dar rienda suelta a la expansión de la cadena. “Mi objetivo era generar experiencias únicas en locales exclusivos y con comida muy rica, casera y abundante”, afirma en su sitio web.
Pani ofrece un menú variado integrado mayoritariamente por recetas dulces, como cookies, alfajores, medialunas, budines y varios tipos de tortas. También pueden encontrarse opciones saladas, como croissants con jamón y queso, escones de queso, sándwiches, desayunos y almuerzos. Además, incorporan algunos objetos de regalería y cerámica, como tazas, velas, vasos térmicos, latas, entre otros ítems.
Sin embargo, uno de los principales diferenciales de la empresa es su segmento de “experiencias”. Se trata de una serie de boxes y desayunos personalizables para entregar en forma de agasajo. El catálogo, al igual que la carta, contempla opciones dulces y saladas.
En lo que respecta a la franquicia, la inversión mínima para establecer un local bajo el concepto de Pani es de U$S 50.000. La cifra contempla la puesta a punto de un local de cerca de 50 metros cuadrados, cifra que puede escalar conforme aumenten las dimensiones del inmueble y los requerimientos de operación de la cadena. El plazo de recuperación estimado es de unos tres años.
Cabe aclarar que el franquiciado se aplica a un formato reducido de las sucursales principales de Pani. Es decir, se trata de un nuevo segmento orientado al autoservicio, con menor demanda de infraestructura y decoración lujosa que en los anteriores. Según describen desde la compañía, el modelo se encuentra inspirado en las cafeterías Pura Vida, oriundas de Miami. Consiste en espacios pequeños con una forma de servicio más ágil.
La firma ya funciona actualmente con dos locales propios en los barrios de Recoleta y Palermo Soho, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y otro en Miami. Mientras que ya instaló dos franquicias en el shopping Unicenter y en Aeroparque, más una internacional en Madrid.
El centro de producción de Pani se ubica en el parque industrial de José León Suárez, mientras que su centro de distribución se ubica en Villa Crespo. La empresa cuenta con una planta de empleados que ronda las 90 personas.
El modelo de franquicias es una de las principales tendencias en los negocios actuales. En 2023, llegaron a la zona marcas como The Coffee Store, Dean & Dennys, Moda Shop y otras como Mostaza, McDonald’s y Tiendas Naturales. Recientemente, la cadena de pizzerías Sbarro inauguró un local en el Alto Rosario Shopping, mientras que la marca de hamburgueserías Morfi Burger estrenó un local en Fisherton (Eva Perón 7866).
