El ministro de Economía, Luis Caputo, confirmó que el impuesto PAIS, que actualmente incrementa el costo del dólar oficial, no será renovado tras su vencimiento el próximo 23 de diciembre.
Esta medida, estipulada en la Ley 27.541 de 2019, implica que las alícuotas asociadas al tributo disminuirán, resultando en un abaratamiento del dólar tarjeta desde el 24 de diciembre.
La decisión también afecta al dólar ahorro y otros gastos en moneda extranjera, como los servicios digitales.
El impuesto PAIS grava una serie de operaciones en moneda extranjera, entre las que se incluyen:
- Compra de divisas para ahorro: Adquisición de dólares u otras monedas extranjeras con fines de atesoramiento personal.
- Gastos con tarjetas en el exterior: Compras realizadas en el extranjero a través de tarjetas de crédito o débito.
- Adquisición de bienes y servicios en el exterior: Incluye tanto la contratación de servicios turísticos y digitales como la compra de productos desde fuera del país.
Inicialmente, el impuesto estableció una alícuota del 30% para estas operaciones, con la intención de reducir la demanda de dólares y fortalecer las reservas internacionales del Banco Central de la República Argentina (BCRA).
Operaciones que seguirán gravadas hasta la eliminación del PAIS
El ministro de Economía, Luis Caputo, aclaró que algunas operaciones continuarán sujetas al impuesto PAIS hasta su eliminación definitiva en diciembre. Entre ellas se encuentran:
- Compra de dólar ahorro y dólar turista: Mantendrán las tasas actuales hasta la fecha de caducidad del impuesto.
- Utilidades y dividendos: Se aplicará según el régimen informativo mensual del BCRA.
- Repatriación de inversiones de portafolio: Relacionadas con utilidades y dividendos generados desde septiembre de 2019.
- Bonos especiales del BCRA: Emitidos como pago de utilidades o inversiones repatriadas.
Con la eliminación del impuesto PAIS, el gobierno se verá obligado a encontrar alternativas para compensar la pérdida de ingresos fiscales. Esto podría incluir ajustes en otros impuestos o la implementación de medidas que garanticen la continuidad de los programas sociales y proyectos de infraestructura financiados por este tributo.
Esta decisión marca un cambio en la política fiscal del país, alineándose con los principios de desregulación y apertura económica promovidos por la administración actual. No obstante, el impacto de esta medida dependerá de la evolución de la economía y de la capacidad del gobierno para fortalecer las reservas internacionales, una prioridad clave en el contexto actual.
