Netflix, Spotify y YouTube apuntan a un negocio de más de US$ 100.000 millones, pero para lograrlo necesitan apoyarse en quienes generan audiencias y comunidades. La “economía de los creadores” ya mueve US$ 250.000 millones y, según Goldman Sachs, superará los US$ 480.000 millones en 2027.
YouTube, pionero en creadores
YouTube fue la que más apostó. Entre 2021 y 2023 pagó US$ 70.000 millones a creadores y en 2023 facturó US$ 40.700 millones en publicidad.
Su gran apuesta es YouTube Shorts, con 50.000 millones de visitas diarias, aunque la monetización todavía es baja. Si logra mejorarla, podría sumar hasta US$ 15.000 millones extra por año.
Spotify busca diferenciarse
Con 615 millones de usuarios activos y 239 millones pagos, Spotify lidera el audio global. Pero sus ingresos por usuario siguen siendo bajos.
La carta fuerte son los podcasts: Joe Rogan, Alex Cooper o Steven Bartlett se convirtieron en marcas propias. Si la app incorpora membresías y pagos directos a creadores, podría sumar más de US$ 1.800 millones anuales.
Netflix, en busca de nuevas audiencias
Netflix crece en ingresos, pero pierde terreno en audiencia frente a TikTok y YouTube.
La plataforma comenzó a probar con realities de creadores y evalúa un fondo de contenidos más baratos y escalables. El objetivo: atraer a la Generación Z, que ya consume a sus YouTubers y TikTokers favoritos más que a series tradicionales.
La economía de los creadores
El modelo ya no es solo distribución: es producción, monetización y comunidad.
Para sumar otros US$ 30.000 millones en ingresos, las plataformas deberán transformarse en facilitadoras de ecosistemas de creadores, con más herramientas y mejores modelos de negocio.
En palabras de un ejecutivo del sector: “Las plataformas ponen los rieles, pero son los creadores quienes manejan los trenes”.
