El anuncio de BYD se realizó al mismo tiempo que se postuló para participar del cupo de autos electrificados importados sin aranceles aduaneros, donde participan otras marcas con presencia en el país. La primera licitación para ese cupo cerró esta semana y BYD se presentó con tres modelos diferentes, que planea vender con precios que oscilarán entre los 25 y 40 millones de pesos: Seagull, Dolphin Mini, Dolphin (los tres son citycars 100% eléctricos) y Song Pro (híbrido enchufable).
Recordemos que el Gobierno argentino creó en febrero pasado un nuevo segmento en el mercado automotor local: permitirá importar 50 mil vehículos electrificados anuales (híbridos, eléctricos y con otras energías alternativas), que tendrán el beneficio de estar exceptuados de aranceles aduaneros (es decir, no tributarán el 35% habitual). Los modelos que califican para este cupo deberán tener un Valor FOB (precio en puerto de origen) por debajo de los 16 mil dólares y las empresas interesadas en comercializarlos deberán declarar el precio de venta que tendrán en el mercado.
De esta manera, el Gobierno otorgará el cupo con prioridad para quienes ofrezcan el valor más accesible. Con esta medida, el objetivo del Estado es meter presión en el mercado, para que bajen los precios de todos los 0km en Argentina.
En la primera tanda de licitación que cerró esta semana se presentaron empresas ya conocidas en nuestro mercado, como Renault (Kwid E-Tech y Arkana MildHybrid), Ford (Territory Hybrid), Baic (EU5), Chevrolet (Spark EUV) y Suzuki (Swift Hybrid). Sin embargo, la sorpresa de los participantes fue la presencia de BYD.
El valor del tiempo
Después de casi siete años de negociaciones con gobiernos nacionales y provinciales, con la intención de radicar una fábrica en el país, esta es la primera vez que BYD manifiesta ante el Gobierno su intención de comenzar a vender autos importados.
Según pudo saberse, la representación de la marca en nuestro país será por medio de una filial, que reportará directo a la casa matriz de China. De esta manera, se descartó la posibilidad de triangular la operación mediante un importador independiente. Al ser una terminal automotriz, la filial podrá avanzar con mayor rapidez en su plan de establecer una producción local.
Al mismo tiempo que BYD solicitó al Gobierno importar autos sin aranceles, la empresa trabaja en conformar su red de concesionarios.
Las firmas que ya fueron confirmadas para establecer representaciones en diferentes ciudades y provincias del país son sociedades que ya tienen experiencia como concesionarios de otras marcas.
Se espera que en abril algunos de ellos viajen a China, para participar de un encuentro internacional de dealers, donde se realizarían los primeros anuncios oficiales para la Argentina.
El objetivo de BYD es comenzar a vender autos 0km en el segundo semestre de este año, con los modelos que le autorice el Gobierno a importar sin aranceles y con otros modelos en análisis, como los que espera comenzar a producir a partir del año que viene en su nueva planta de Salvador de Bahía (Brasil).
